No todos los días en moto son iguales.
En ocasiones -y no vale buscarlo, tiene que salir así- los astros se alinean y lo que iba a ser un paseo más acaba por ser un día especial.
Para ello tan solo hacen falta unas motos, unos colegas, ganas de rodar.... y una previsión de temperaturas con las cuales la mayor parte de la gente se quedaría en casita.
Ni que decir tiene que hay que comenzar -y terminar- la jornada pasando un poquito de fresco. -2, -3º grados no son motivo suficiente para detener a unos aguerridos moteros y sus ansias de hacer curvitas con un ojo puesto en el asfalto (bueno, a veces los dos y casi que también los pies por la cuenta que nos tenía) y el otro en el cambiante y espectacular paisaje.
Porque resultó ser uno de esos días en que te encuentras, de verdad, con ganas de ir en moto, siendo la impresionante nevada caída en buena parte del recorrido un poderoso aliciente para el disfrute del sentido de la vista, el cual se encarga de transmitirnos lo espectacular que puede llegar a ser la naturaleza en ocasiones.
Olvidados, al menos por unas horas, los habituales problemas del día a día, nos toca disfrutar, y descubrir una nueva sorpresa, un nuevo motivo de asombro detrás de cada curva, en cada tramo de la carretera.
Y bueno, para qué extenderme más... Por mucho que lo intente, creo que tan solo tres personas, aparte de mi claro está, os podrán trasladar la realidad de como fue ese día...
No dejemos que nuestras ilusiones se enfríen...
Salgamos a rodar...
Qué afoticos más chulas!!
ResponderEliminarY qué estupendo día pasamos!
;-)
Una temperatura ideal para dar una vuelta en moto!
ResponderEliminarcuando seais mayores alguien utilizará esto para complicaros la vida. jajajaja
ResponderEliminarKe no lo lean los hijos o nietos, que estareis perdidos.
Pinocho40