He recibido, y leído
en un par de ratos (tengo que decir que se me ha hecho corto) el ultimo libro publicado por el
viajero y escritor Miquel Silvestre
Y bien, el contenido del libro en sí me ha gustado, por lo que paso a comentar que la "Fórmula Silvestre", esa particular forma de
conjuntar viajes en moto, historia y vivencias con la que Miquel nos obsequia,
al menos para mi, funciona.
Un viaje en moto como
vertebrador de la historia que se quiere contar, en la cual nos vamos a
encontrar paisajes, vivencias, personas y personajes, unas veces tomando una pinta de Guiness y otras siendo parte de la Historia, con mayúsculas, que sale a nuestro
encuentro de forma bastante amena, confrontando en ocasiones el modo de vida
actual y el de siglos pasados, recordándonos a cada paso que si la vida hoy en
día es dura en ocasiones, en el pasado lo fue mucho más...
Retazos de Historia y
de las -generalmente barbaras- costumbres de la época, no solo de nuestro país
sino también de otros países europeos, con Irlanda e Inglaterra a la cabeza,
como no podía ser de otra forma dado que es allí donde se desarrollaron tanto
los hechos que Miquel "resucita" para nosotros como sus vivencias en
dicho viaje, en las cuales queda retratada también la crudeza del clima de
aquellas islas, a las que Miquel hace frente subido en la moto, una forma más
que real de tomar mínimamente el pulso a los padecimientos que nuestros
paisanos tuvieron que arrostrar en aquella desgraciada y desastrosa empresa a
la que les tocó hacer frente.
Constatado queda también
el distinto enfoque con el que los respectivos países, así como los habitantes
de estos, afrontan la Historia, con el recuerdo de lo acaecido resistiendo en
mayor o menor medida en aquellos sitios donde tuvo lugar, a pesar del devenir
del tiempo....y de las nuevas costumbres y modos de vida.
Bienvenida
sea esa "Fórmula" que ha permitido a Miquel llevar a cabo su
particular Fuga, dejando atrás los "peligros" de una vida acomodada a
cambio de recorrer el mundo en su moto, siendo testigo presencial de lo que en el acontece día a día, arrostrando los peligros, inconvenientes e incomodidades
que ello implica, compensados éstos por vivencias y entiendo que por una
realización personal que tan solo a él le compete.
Así pues, esperemos
que Miquel continúe con dichos viajes, con su perenne búsqueda tanto de hechos
históricos como de modos de vida, y sobre todo, que es lo que más nos interesa,
contándolo en sus libros.
Tan solo queda
solicitar que, a ser posible, dichos libros sean algo más extensos que el
actual, seguro que se lo agradeceremos!
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